Laura Alonso y el proyecto contra los DNU que no fue

Hija de puta

La actual responsable de la Oficina Anticorrupción, Laura Alonso, quien  a su vez obtuvo el cargo a través de un decreto ya que no cumplía con los requisitos para llevar a cabo tal tarea, presentaba en 2010 un proyecto de ley para limitar el uso de los Decretos de Necesidad y Urgencia (DNU).

La entonces diputada, famosa por sus duras criticas al desempeño del gobierno exponía en twitter y en su pagina. «Utilizar los DNU para gobernar implican eludir al Congreso, evitar la deliberación y dar la espalda al pueblo de la Nación y a las provincias que son representadas en ambas Cámaras legislativas.»

Laura alonzo DNU

Y continúa «Ayer y hoy, muchos parecen haber olvidado que los DNU son medidas de carácter excepcional. Para mí, la Constitución es clara pero las ansias de poder demuestran lo contrario. El Ejecutivo gobierna pero no gobierna solo. Tanto el Congreso como el Poder Judicial, de distintas formas y en diferentes circunstancias, son parte del proceso de formulación de políticas públicas.»

para ver la presentación del proyecto (click acá)

El proyecto de ley consistía en que el Congreso quede automáticamente convocado cuando se dicte un DNU, que el Jefe de Gabinete concurra para dar explicaciones acerca de la necesidad y la urgencia, que las dos Cámaras del Congreso expresamente lo ratifiquen, rechacen o declaren nulo en el lapso de 30 días, que el silencio de alguna de las Cámaras implica nulidad. 

Si bien el proyecto puede sonar interesante jamas se presentó y ni siquiera se toca el tema ahora que Mauricio Macri es presidente, y la pregunta es si Laura Alonso criticará con el mismo énfasis el empleo de los DNU en este momento como lo hacia en 2010.

Rumbo a un Alto Rendimiento Deportivo

El Gobierno Nacional presentó en el año 2009 un proyecto de ley, en conjunto con el Comité  Olímpico Argentino y la Secretaría de Deporte de la Nación para la creación del Ente Nacional de Alto Rendimiento Deportivo (ENARD), para la administración de becas a deportistas y entrenadores del alto rendimiento deportivo, la subvención de viajes y materiales de trabajo.

El Congreso Nacional sancionó la ley N° 26.573 impulsando la creación e iniciando su gestión en agosto del 2010 en conjunto con la Secretaría de Deporte de la Nación, el Comité Olímpico Argentino, las Federaciones Deportivas Nacionales, y los gobiernos provinciales y municipales. El plazo estimado para poder visualizarse un desarrollo sostenido está pautado a partir del 2020, aunque se empezarían a ver mejoras a partir de los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro en 2016, habiéndose visto ya mejoras en el rendimiento en Londres 2012 en cuanto al incentivo en deportes individuales.

El ENARD  se financia mediante el producto de un cargo del uno por ciento, aplicado sobre el monto que las empresas de telefonía celular facturan a sus clientes por los servicios de telecomunicaciones brindados, un total de 15 millones de pesos mensuales. Según el artículo 35, “está sujeto al control Externo de la Auditoría General de la Nación a efectos de monitorear y controlar la administración de los recursos asignados”. Al ser sus fondos asignados por Ley, no se verán afectados ante una posible disputa en la aprobación del Presupuesto Nacional.

Un tercio del  presupuesto total del Ente, está destinado al pago de becas, un total de 1659, compuesto por 894 a deportistas de elite, 486 jóvenes talentos, y 279 entrenadores y técnicos con acceso a cobertura médico-asistencial. También tienen como objetivo brindar apoyo en la preparación y la participación en competencias nacionales e internacionales de alto rendimiento, que abarcan desde la compra de pasajes, alojamiento y alimentación hasta el pago de gastos de logística y traslado de equipamiento. El ENARD destina además, parte de su presupuesto para la organización de competencias internacionales en el país y para el equipamiento e instalaciones necesarias para el entrenamiento y participación de los atletas en competencias deportivas.

El Ente Nacional de Alto Rendimiento Deportivo ha implementado  anualmente, un sistema por el cual las Federaciones Deportivas realizan una planificación y presentan las solicitudes de apoyos económicos y becas a sus atletas, las que son evaluadas previamente por un grupo de especialistas deportivos, para luego ser aprobadas por parte de las instancias superiores.

Una vez que fue aprobada la planificación anual de cada disciplina, se pone en marcha el proceso interno de gestión de compras del material, y se realizan las diferentes contrataciones y los registros de los nuevos atletas que serán becados a partir de ese año.

El primer salto de calidad que dio la creación de este Ente, fue el evitar desaprovechar los talentos olímpicos que genera el país por el hecho de que no pueden solventarse los gastos de los inicios en deportes poco comunes y con gran demanda de gastos de acarreos de objetos que hacen al deporte como es el caso del salto con garrocha, lanzamiento de martillo, yachting, kayak, etc.

De los años 90 a esta parte, para poder alcanzar una beca por parte del estado, primero había que conseguir un triunfo deportivo, ya sea una medalla o entrar en competiciones importantes. El deportista no solo tenía que cargar con el peso de entrenarse, sino que también tenía que trabajar para poder así pagarse todos los gastos de su deporte.  Desde la creación del ENARD, se evalúan a los talentos que van surgiendo en las distintas disciplinas y se los subvenciona desde el momento en que se detecta, como es el caso del lanzador de jabalinas, Braian Toledo. Esto mostró en los Juego Olímpicos de Londres, aunque con un escaso logro en el medallero, una mejora en los deportes individuales, habiéndose en estos acercado a los primeros puestos y logrado el oro como en el caso del taekwondista Sebastián Crismanich.